La fisióloga Ida Henrietta Hyde (1857-1945) falleció un 22 de agosto.
Desarrolló un micro-electrodo suficientemente potente como para estimular tejidos química o electrónicamente y, además, lo suficientemente pequeño como para inyectar o extraer tejido de una célula.
Se doctoró en la Universidad de Heidelberg (Alemania), con 39 años, después de superar múltiples obstáculos por ser mujer.
Según su autobiografía (1938) –Before Women were human beings, Antes de que las mujeres fuesen seres humanos–, su asesor de tesis Wilhelm Kühne, se burló inicialmente de su deseo de obtener una titulación, y no se le permitió asistir a clases ni laboratorios.