El 1 de mayo de 1949, el astrónomo Gerard Kuiper (1905-1973) descubrió la segunda luna de Neptuno, Nereida.
La sonda espacial Voyager 2 pasó muy lejos de Nereida cuando visitó el sistema neptuniano en 1989: las fotografías que envío tienen poca resolución y sólo muestran que su forma es irregular. Apenas pueden distinguirse detalles de su superficie, que está recubierta por una capa de metano sólido.