Tres jugadores entran en una habitación, y se coloca en la cabeza de cada uno de ellos un sombrero azul o negro. El color de cada sombrero se determina mediante un sorteo de manera independiente para cada jugador. Cada persona puede ver los sombreros de los otros jugadores, pero no el suyo.
Los jugadores pueden discutir su estrategia antes de comenzar a jugar, pero después no pueden comunicarse. Cada uno de ellos, tras ver los sombreros de sus compañeros, debe adivinar (simultáneamente) el color de su gorro o pasar.
El grupo comparte un premio 1.000.000 euros si al menos un jugador adivina el color de su sombrero y ninguno se equivoca en su apuesta.