El 26 de junio de 1886, el químico y farmacéutico Henri Moissan (1852-1907) obtuvo por primera vez flúor en forma pura, tras varios intentos fallidos por parte de algunos investigadores.
Moissan obtuvo precisamente el Premio Nobel de Química de 1906 por su investigación y aislamiento del flúor elemental, y por [el] horno de arco eléctrico al que da nombre.
El flúor es el elemento químico de número atómico 9; a temperatura ambiente es un gas de color amarillo pálido. En forma pura, causa graves quemaduras en contacto con la piel.